La paciencia es la cara del éxito empresarial

 

La paciencia y el éxito van untos de las mano. Aplicada al mundo empresarial podemos afirmar que la paciencia puede ser el éxito de un proyecto. Saber esperar, no desesperarse en algunas situaciones y sobre todo no dejar de avanzar aunque la tormenta venga de cara son fórmulas que pueden establecer el triunfo.

También es cierto que la paciencia tiene un límite y hay que saber actuar en consecuencia. Cuando luchamos mucho por un proyecto que no sale adelante, es hora de admitir que la paciencia no ha servido. Pero también es fundamental hacer un diagnóstico de la causa por el cual no funciono.

 

La paciencia no está de moda en las empresas

Hay que decir que la paciencia es un concepto que se aplica a las pequeñas y medianas empresas, pero que en las grandes no encaja. Las grandes compañías poseen más recursos para momentos de malos resultados y como deben rendir cuentas a inversores o accionistas normalmente no se pueden permitir ser pacientes.

En las empresas más pequeñas no se dispone de ese colchón para pérdidas prolongadas y si sus responsables creen en lo que están haciendo y confían en que la crisis pasara.

 

No olvides que la paciencia tiene un límite

El punto de partida es tener una buena planificación previa. A veces las cosas no salen como habíamos previsto y los riesgos se han pasado por alto. En ese caso es imprescindible identificar las causas de que no estén yendo como debería y saber si se puede enderezar el rumbo. Si los riesgos se escapan a todo control, habrá que calmarse y esperar pacientemente a que se arreglen rápido.

 

 

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